Existe cantidad de objetivos al respecto, pero… ¿Cuál es el costo de «resolver» el cambio climático? ¡Entérate cuánto por el clima!
Uno de los principales mensajes de la COP26 —Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2021— fue la urgencia de contrarrestar las alteraciones en la temperatura del planeta, sin embargo, ¿Cuánto cuesta «resolver» el cambio climático?
Si bien los propósitos socialmente responsables por parte de las organizaciones, Gobierno y empresas son un gran aporte, la realidad es que para realizar una transición hacia una economía más sostenible se requiere de un amplio presupuesto.
Costo de resolver el cambio climático
McKinsey —la empresa de consultoría estratégica más prestigiosa del mundo— realizó el informe La transición neta cero: lo que costaría, lo que podría traer, el cual analiza la transformación económica que implicaría una transición a cero emisiones netas: las principales convocadas son las empresas; empero, todos los sectores están llamados a tomar acciones.
Te presentamos los seis grandes temas del informe:
1. Definir la transición
Todas las personas vivimos en un mismo planeta, por lo que las acciones tienen que ser universales y significativas; sin embargo, no todos tienen el mismo contexto: la geografía, las condiciones sociales e incluso culturales, afectan considerablemente a los individuos. Esto se involucra con el costo de resolver el cambio climático.
Nuestro análisis no es una proyección ni una predicción y no pretende ser exhaustivo; es la simulación de un camino hipotético y ordenado hacia 1,5 °C utilizando el escenario Net Zero 2050 de la Red para la Ecologización del Sistema Financiero.
McKinsey.
Para definir la transición neto cero se necesita de 6 puntos específicos:
- Universal: Todos los países contribuyen a las emisiones al igual que todos los sectores de la economía. Por lo tanto, alcanzar las emisiones netas cero requerirá una transformación universal de la economía global.
- Significativo: Se necesita invertir alrededor del 60% en activos físicos de energía para alcanzar la transición cero.
- Carga frontal: La transición energética supondrá mayor costo en el pago de energía, la cual se estabilizaría hacia 2040 e incluso bajaría de costo al actual, pero estas décadas serían críticas.
- Desigual: Los sectores económicos, países, comunidades e individuos tendrían una transición desigual. Por ejemplo, regiones como África subsahariana, América Latina, India y algunos países asiáticos requerirán 10% del PIB , una medida y media más que otros países.
- Riesgos: Esta característica se entiende dentro de los riesgos climáticos físicos, los cuales pueden agudizarse sino se realizan actividades para la transición neto cero.
- Oportunidades: Para todos los sectores de la economía y todos los países. En el caso de las empresas las oportunidades son a través de procesos y productos de descarbonización; productos bajos en carbono que reemplacen otras opciones más contaminantes; y nuevas ofertas de apoyo a la producción en las dos primeras categorías.
En total, nuestro análisis sugiere que el escenario Net Zero 2050 requeriría un gasto en activos físicos de aproximadamente 275 billones de dólares entre 2021 y 2050 (alrededor del 7,5% del PIB durante el período) en las áreas que analizamos.
McKinsey.
2. Acelerar de la descarbonización en todo el mundo
El informe clasifica a siete sistemas de energía y uso de la tierra que dan cuenta de las emisiones globales: energía, industria, movilidad, edificios, agricultura, silvicultura y otros usos y desechos, los cuales deberán transformarse para lograr emisiones netas cero.
Cabe destacar que, a pesar de que si estos sistemas hoy iniciaran su transformación hacia la descarbonización, sus anteriores actividades han dejado huella en la atmósfera que tardará décadas e incluso un siglo como el óxido nitroso, del cual, la energía contribuye con el 3% dentro de su huella ecológica en la atmósfera.
Dentro del costo de resolver el cambio climático también se incluyen acciones específicas, entre ellas:
- Cambiar hacia la electricidad de cero emisiones.
- Adaptar los procesos industriales y agrícolas.
- Aumentar la eficiencia energética y gestionar la demanda de energía.
- Utilizar la economía circular.
- Consumir menos bienes intensivos en emisiones.
- Implementar tecnología de captura, utilización y almacenamiento de carbono.
- Mejorar los sumideros de gases de efecto invernadero tanto de larga como de corta duración.
3. Transformación económica
Se han mencionado las actividades y algunos datos sobre el costo de resolver el cambio climático; sin embargo, ¿qué cambiaría en la transformación neta cero? La respuesta es que implicaría una transformación significativa en la demanda, la asignación de capital, los costos y los puestos de trabajo. Es decir, los cambios serían transversales, además de acelerados si el propósito son las emisiones cero neto para 2050.
Por ejemplo, los automóviles tradicionales de combustibles fósiles verían una baja en su demanda y producción, en consecuencia los empleos profesionalizados en el área se perderían; sin embargo, también crecerían otras industrias.
Al considerar los ajustes económicos y sociales necesarios para lograr emisiones netas cero, es importante no perder de vista el contexto más amplio: los riesgos a largo plazo del aumento del calentamiento y la mayor acumulación de riesgos climáticos físicos.
McKinsey.
4. Exposición desigual de los sectores económicos
Se ha hecho mención de que todos los sectores de la economía, todos los países y todas las personas se exponen a la transición a emisiones cero; empero, también se ha hecho énfasis en la desigualdad en la que pueden enfrentar dicha transición y el coste de resolver el cambio climático.
En ese sentido, específicamente, en los sectores de la economía que se encontrarán más expuestos, se encuentran aquellos que contribuyan más a la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI), por ejemplo, el carbón y el gas. Además, cerca del 20% del PIB mundial se encuentra en estos sectores y 10% en cadenas de suministro con altas emisiones.
De acuerdo con el informe, dentro de la movilidad, el sector de transporte de carretera contribuye con alrededor del 75% de todas las emisiones de la movilidad. Lograr la descarbonización, implicaría reemplazar los vehículos actuales por eléctricos o alimentados por celdas de combustible de hidrógeno. Lo cual contraería una pérdida de 13 millones de empleo en el ramo de los vehículos actuales que parcialmente se repondría con 9 millones de empleos de la energía eléctrica.
En el escenario Net Zero 2050, el gasto anual sería de 3.5 billones de dólares en ambos vehículos y para construir infraestructura de carga y combustible entre 2021 y 2050.
Mckinsey.
5. Cómo se desarrollaría la transición neta cero
Se ha hecho mención, la desigualdad estará presente dentro de la transición neta y sería parte del costo de resolver el cambio climático. Estas desigualdades se desarrollarían tanto en el medio natural como en el social.
Tal es el caso de los países en desarrollo, los cuales tienen proporciones relativamente mayores de empleos, PIB y capital en sectores que estarían más expuestos, por ejemplo: India, Bangladesh, Kenia y Nigeria.
Esta desigualdad no solo es propia de países en desarrollo, sino también dentro de las economías desarrolladas. Por ejemplo, en Estados Unidos, el 10% de empleos de 44 condados depende de combustibles fósiles, por lo que las economías dependientes de estos combustibles se verían más afectadas.
Frente a ello, una reducción de este costo por resolver el cambio climático, se encuentra en la disponibilidad de capital tecnológico y humano que sea adecuado para la transición neto cero 2050 y así disminuir la cantidad de desempleo y el coste económico que implica.
6. Acciones para las partes interesadas
Estos elementos hablados en informe convocan a un llamado a la acción reflexiva y decisiva, además de urgente para asegurar una transición más ordenada hacia el cero neto para 2050.
Las economías y las sociedades tendrían que hacer ajustes significativos en la transición. En ese sentido, las partes interesadas tendrían que actuar con unidad, resolución y de forma innovadora para generar resultados equitativos a largo plazo. Por lo tanto, se destacan las siguientes tres categorías de acción:
- Catalizar la reasignación efectiva de capital y nuevas estructuras de financiación: Desarrollar nuevos instrumentos y mercados financieros (incluidos los mercados de carbono voluntarios), desplegar colaboraciones entre los sectores público y privado, entre otros.
- Gestionar los cambios de demanda y los aumentos de costos unitarios a corto plazo para los sectores mediante la creación de conciencia y la transparencia en torno a los riesgos y oportunidades climáticos.
- Establecer de mecanismos de compensación para hacer frente a los impactos socioeconómicos con: programas de diversificación económica, programas de readiestramiento y redistribución para los trabajadores afectados y planes de apoyo social.
Es importante resaltar que el costo de resolver el cambio climático no solo responde a los elementos de financiamiento, sino a las actividades, acciones y compromisos que supone transitar a una economía cero neta; pero no hay que olvidar que el costo de no hacer nada es aún más alto.
Fuente: ExpokNews