Con el cambio climático y los posibles impactos ambientales y sociales, se están adoptando estrategias agrícolas para que las plantas puedan crecer de manera controlada.
Una de las estrategias consiste en «escuchar lo que dicen las plantas», según establece un reportaje de la BBC News en el que se analiza cómo la empresa estadounidense de tecnología agrícola Gardin utiliza sensores e inteligencia artificial para mejorar la productividad.
La tecnología se utiliza para analizar hojas de plantas individuales y sugerir cambios para cada tipo de verdura.
Como dice el científico líder en información Julian Godding: «Nuestros sensores hacen posible monitorear todo el entorno en el que crecen las plantas, moviéndolas para ver cómo están cambiando.»
La empresa utiliza la optoelectrónica para comprender cómo crecen y se desarrollan las hojas en una plantación vertical. Con los datos recopilados, una máquina de aprendizaje que trabaja a partir de una gran colección de imágenes de plantas en diferentes etapas de crecimiento, analiza la calidad de los procesos de fotosíntesis en cada planta. Con esta tecnología, la empresa busca un crecimiento eficiente.
Godding dice que es una forma de hablar con las plantas para ver si les va bien. Con base en esta experiencia, la empresa asesora a los agricultores sobre las mejores cosechas según las condiciones existentes.
La tecnología espera mejorar la productividad, así como la calidad de los alimentos que se cultivan, mediante el uso de tecnología altamente desarrollada y en contacto con la inteligencia artificial.
Fuente: Funi Blogs